Así como nos hacemos mayores pensamos menos en nosotros mismos. Siempre tenemos “otras prioridades”; que si los niños, la familia, el trabajo…. Todo antes que nosotros mismos.
Tendemos a creer que no necesitamos casi nada o que otros lo necesitan más que nosotros y así pasa uno y otro día… y vuelve a ser Año Nuevo, olvidándonos de nosotros mismos, de lo que nos gusta o lo que nos hace felices (o las dos cosas).
Busca tu momento
Sé egoísta (que no creo que sea la palabra adecuada), pide a los Reyes o a este 2017 un regalo para ti, de esos privilegios que realmente llevas tiempo pensando y nunca ves ocasión por lo mismo que he comentado antes; porque no es el momento ¿Y cuándo lo es? El momento hay que buscarlo.
La belleza que irradia tu felicidad
Cuidarse y preocuparse por uno mismo nos aporta muchas cosas que no encontraremos en ningún otro sitio, ni en los alimentos, ni en la cosmética, ni en el gimnasio… nos aporta felicidad y sentirse bien por dentro, a gusto con uno mismo, es el mejor tratamiento de belleza que nos podemos hacer y además duradero.
Mi regalo de Reyes
Os voy a contar cual ha sido mi mejor propósito para este año o lo que podríamos llamar mi regalo de Reyes adelantado y del que voy a disfrutar en forma de bienestar durante mucho tiempo.
Un privilegio a menos de dos horas de Zaragoza
De sobra es sabido que el Pirineo Aragonés es una de las mayores joyas que tenemos en nuestra comunidad. Interminables sus rincones y lugares mágicos donde perderse varios días.
A mí me gusta la montaña siempre, pero especialmente en dos estaciones; primavera e invierno. Además, creo que es, en ambas, cuando podemos disfrutar al máximo del espectáculo de color y naturaleza que nos ofrecen.
Tramacastilla de Tena, una joya de la naturaleza
Si acotamos un poco más (y sé que es complicado) me quedo con un lugar que, para mí, lo tiene todo, Tramacastilla de Tena. A más de 1.200 metros de altura se sitúa esta preciosa localidad del Valle de Tena. Un enclave maravilloso con una pradera interminable y el pantano de Búbal a sus pies.
Sin duda el lugar, por sí solo invita a desconectar, al descanso, pero también a no tener tiempo para aburrirse haciendo senderismo, rutas culturales, barranquismo o esquí, teniendo estaciones como Formigal o Panticosa muy cerca para disfrutar del deporte blanco.
Un privilegio al alcance de la mano
En un lugar como Tramacastilla de Tena sólo pueden existir lugares increíbles y de ensueño como el que yo he podido disfrutar para comenzar el 2107 con energías renovadas.
Hotel Privilegio de Tena
Su nombre hace honor a todo lo que nos encontramos en este lugar desde el momento en el que cruzas su puerta. Empezando por el trato personal, cercano y cariñoso de sus propietarios Juan y Anabel, hasta el último profesional de sus instalaciones.
Desde su gastronomía con productos de temporada y de la tierra hasta el último detalle más cuidado.
El gusto es mío
Mi recomendación más personal es que te dejes llevar, ellos sabrán cuidarte, mimarte y sacar lo mejor de ti. Sus habitaciones tienen ese calor especial que logra envolverte y disfrutar del momento, olvidándote del mundo.
Date un capricho con uno de sus masajes o disfruta de silencio en su spa.
Un privilegio muy cerca de ti. Te invito a descubrirlo.
